Vida sustentable
¿Quieres ser parte de la solución y no del problema? ¿Has sentido que el tema de la contaminación y el daño al planeta ya no da para más? Lo experimentamos con los bruscos cambios climáticos que vivimos en Chile, junto con noticias alarmantes, como es el caso de la isla de plástico que está en el océano Pacífico, frente a nuestro País y que mide tres veces el tamaño de Chile continental.
Es por esto que más personas cada día nos estamos haciendo cargo y queremos un cambio. Empecemos a cambiar nosotros para que así más personas se sumen.
¿Por donde partir? En Freemet te ayudamos con estos cinco hábitos, que son muy simples, pero que como dice este lema (que nos encanta!): “Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo". ¡...así que vamos por ese Mundo Mejor!
1. Evitar Botar Alimentos
No sé si sabias, pero la cantidad de alimentos que se botan son cifras alarmantes, así como dato en los países desarrollados se despilfarra el 56% de los alimentos del planeta y en total al año son cerca de 1.300 toneladas de comidas que se botan en el mundo. De esta cantidad la mayoría es fruta, la cual necesita litros y litros de agua para su desarrollo, es por esto que evitar desechar los alimentos es una gran ayuda al planeta.
¿Y cómo lo podemos hacer? primero evitando elegir alimentos solo por su aspecto físico, hay fruta que no es tan atractiva físicamente pero cumple la misma función que es alimentar, en segundo lugar ser creativos y buscar recetas donde podamos usar todos los ingredientes que tenemos en nuestro refrigerador y por último organizarse en las compras y comprar solo lo que es necesario y vamos a consumir. Así no solo evitamos botar alimentos, si no que también podemos ahorrar dinero.
2. Comprar Solo Lo Necesario
Este simple acto ayuda a evaluar si “esa” compra es algo imprescindible, con esto evitamos acumular tantas cosas, generar mucha basura y también podemos ahorrar dinero que puede ser gastado en experiencias, en vez de cosas materiales, por lo menos para nosotras, el dinero mejor gastado, es el invertido en un paseo, viaje, salir a comer o un masaje de relajación, ya que son momentos inolvidables.
3. Apagar La Luz
No sé si les pasa, pero en casa siempre decían, “apaga la luz porque no somos accionistas de la compañía de electricidad”, jajaja y bueno este mensaje nos quedó tan grabado, que hoy apagamos todo a cada rato y entendemos que el beneficio no es solo por el costo de la electricidad, si no que hay un gran aporte al medio ambiente.
Sumado a esta acción, se puede complementar con desenchufar todos los artefactos que gastan energía de manera pasiva, utilizar ampolletas ahorradoras que reducen el consumo energético en un 75% y recordar que existe la hora del planeta donde todo el mundo apaga las luces por una hora un día al año.
4. Reciclar y Reutilizar
Estamos inmersos en la cultura del usar y tirar, y en la basura de cada día están los recursos que dentro de poco no tendremos. Cada persona genera en promedio 1 Kg de basura al día, lo que da 365 Kg al año.
La mayoría de los materiales que usamos pueden ser reciclados en los puntos limpios de @triciclo y puntos verdes de cada comuna, para ser utilizados en otras aplicaciones; materiales como el vidrio, pueden reciclarse 40 veces y el plástico se puede reciclar calentándolo hasta que se funda dándole una nueva forma, nosotras trabajamos con los amigos de LUP quiénes hacen una fibra plástica para crear hermosos canastos de Ropa para Freemet. (Quieres conocer los canastos hechos con envases de Freemet?).
Además tanto los envases de vidrio como los plásticos Pet 1 y HDPE 2 se pueden reutilizar, comprando formatos del mismo material pero en tamaños más grande para recargar, devolviendo los envases para su reutilización o comprando a granel.
5. Usar Productos Biodegradables y Certificados Como Ecológicos
Hay productos que usamos en grandes cantidades y por largo tiempo en nuestra vida es por eso que es ideal elegir productos que sean ecológicos y que cumplen con certificaciones que avalen esta característica. Si además estos productos son fabricados de manera local, es mucho mejor ya que disminuimos significativamente la huella de carbono generada por el traslado de productos desde el extranjero.
Esperamos que estos sencillos consejos te hayan sido útiles y recuerda que instalar un hábito demora 60 días, es por esto que hay que ser perseverante y organizado si queremos tener éxito.
